El jueves 14 se presenta el libro "Docentes privados. Desafíos particulares", de Martín Lucero.
por La Capital
"Descorrer los velos, abordar tabúes, debatir conceptos y preconceptos. Hablar de cómo vemos la escuela privada y hacia dónde queremos ir, especialmente a dónde queremos ir", dice el secretario general del Sadop Rosario, Martín Lucero, es una de las premisas de su libro "Docentes privados. Desafíos particulares. Educación privada e inclusión" (Homo Sapiens Ediciones), que presentará el jueves que viene, a las 19, en el Instituto Superior Nº 4.087, de Montevideo 1567. Propone un debate abierto sobre la educación privada. En especial sobre temas como la libertad de enseñanza, los prejuicios gestados alrededor de esta educación, el papel del Estado y también acerca de los derechos laborales de los docentes del sector. La mirada que sobrevuela cada capítulo es la búsqueda de consensos, pensando en la inclusión educativa.
Como expresa el autor, esta producción no tiene una "pretensión académica o filosófica", sino más bien proporcionar a los lectores (excede a los educadores del sector privado) un análisis surgido "a la luz de la propia experiencia militante".
"Docentes privados..." puntualiza algunos consensos que se muestran como "sustanciales para pensar una educación de gestión privada inclusiva, que atienda la diversidad aportando, desde una visión popular y pública de la educación como bien social, a un modelo de país que asuma la justicia social como bandera y la igualdad de oportunidades como garantía de desarrollo personal y social".
Carrera docente. Entre los temas urgentes, de impostergables discusiones, que toma el libro está el de la carrera docente y los derechos laborales de los educadores de privada. Es así que Lucero recuerda que el despido sin causa y la discrecionalidad para asignar cargos y horas cátedra son "dos poderosas herramientas que el empleador tiene en sus manos" en las escuelas privadas.
"Es que si existe un lugar dentro del sistema educativo donde la disparidad entre las partes de la relación laboral se muestran evidentes hacia adentro de los establecimientos educativos, son las escuelas de gestión privada", afirma en uno de los capítulos de su libro.
La disparidad de la que habla salta a la vista cada tanto cuando se hace público el despido de un profesor por reclamar un derecho postergado, o "no ajustarse al ideario de la institución", o se desplaza a una maestra "por adherir a un paro", entre otras inexplicables razones.
Casos que desnudan la vulnerabilidad laboral de los educadores del sector y el reclamo siempre postergado por la carrera docente. Y que invitan a debates sobre el papel que tiene el Estado en el financiamiento de los colegios privados (control de los subsidios), y la necesidad de superar la visión mercantilista impuesta en los ‘90 sobre estas escuelas.
Vida democrática. El secretario general del Sadop advierte que aún hoy las entidades propietarias son las que disponen cómo se da la carrera docente. "De esta manera las posibilidades de ingreso, incremento o ascenso de los docentes quedan sujetas a una evaluación (de la que habitualmente no se conocen los parámetros) del representante legal de turno. En este contexto los docentes son víctimas de un sistema en el cual para mejorar no importan tanto sus méritos personales, intelectuales o profesionales tanto como la consideración que tenga de ellos el responsable de la institución".
"Seamos claros: el ideal de algunos empleadores no es necesariamente que progresen los mejores trabajadores, sino sólo aquellos que mejor les caen en gracia. Y en este sentido la idea de que haya reglas que estandaricen por méritos la carrera docente les genera rechazo en tanto la entienden como el avasallamiento de la facultad de «dirección» que tiene el empleador", señala en su obra.
Para el educador, la consolidación de la democracia debe alcanzar también a las instituciones. Este, entiende, es un gran desafío por recorrer. Porque tal como sostiene, no es posible hablar de diálogo, participación, acuerdos, escuelas democráticas "y demás conceptos que pueblan las páginas de los Proyectos Educativos Institucionales cuando a un docente se lo promueve o se lo asciende según el caprichoso criterio de su empleador es un total contrasentido. Si hay imposición, no hay consenso. Si hay autoritarismo, no hay democracia".
Presentación. El libro será presentado en la sede del Instituto Superior de Capacitación del Sadop Rosario por el profesor José Romero; el secretario del Sadop nacional, Mario Almirón, y la periodista Marcela Isaías. La actividad estará coordinada por la secretaria de Acción social del Sadop Nacional, María Lazzaro.